sábado, septiembre 23, 2006

LA PÁGINA DE SIECUS SOBRE EDUCACIÓN SEXUAL


PREGÚNTELE A AMY (*)

¿Debo decirles a los otros padres y madres que nuestros hijos/as estaban jugando al doctor?

P El otro día, la amiguita de mi hija de 4 años vino a la casa después de la escuela para jugar con mi hija. Cuando fui a supervisarlas, las encontré jugando al doctor. ¿Debo decírselo al padre o madre de la amiguita?

R Sí, es importante que mencione lo que observó. Los padres y madres agradecen saber qué pasa con sus hijo/a cuando no están con él o ella, ya sea que jugó y se divirtió mucho, o que tomó una merienda después de la escuela o que se cayó y se raspó la rodilla al estar jugando afuera. Y aunque no sea fácil de contar, también debe compartir la situación relacionada con la sexualidad y cómo la manejó. Si después de saberlo, el otro padre o madre no está de acuerdo con lo que hizo y dijo, no lo tome como algo personal.
La realidad es que existe una variedad de métodos de crianza. Sin embargo, la mayoría de los padres y madres estarán contentos por informarles de la situación y darles la oportunidad de compartir mensajes y valores con su hijo/a.


¿Cuándo la conducta sexual infantil se vuelve un motivo de preocupación?

P En el baño de la escuela, mi sobrino de 8 años tocó el pene de otro niño. Se le dijo que sus acciones eran impropias y no las ha vuelto a repetir, pero todavía estoy preocupada. ¿Este comportamiento es normal?

R Sí, es normal que los niños/as sientan curiosidad por las partes del cuerpo. Y, como no ha vuelto a pasar, seguramente su sobrino sólo lo hizo por curiosidad. Sin embargo, si esta u otras conductas sexuales continuaran a pesar de haberle dicho que hizo algo impropio, entonces podría ser un motivo de preocupación. Si esto ocurriera, los padres, las madres y los/as tutores deberían considerar llevar a su hijo/a para que lo evalúe un profesional que especializa en desarrollo sexual infantil y/o abuso sexual.

El libro Understanding Your Child's Sexual Behavior: What's Natural and Healthy de Toni Cavanaugh Johnson, Ph.D., puede ayudar a que los padres y las madres aprendan más sobre la conducta sexual infantil. El libro aborda los comportamientos sexuales sanos y no sanos de los/las niños y adolescentes desde el nacimiento hasta los 12 años de edad, y proporciona información que ayuda a identificar, entender y reaccionar adecuadamente ante estos comportamientos.

¿Qué hago si mi hijo preadolescente ve pornografía en la Internet?

P Mi hijo de 12 años siempre está usando la Internet. Dice que está haciendo tarea. Después de revisar su computadora sin que lo supiera, parece que ha estado visitando páginas de Internet para adultos/as, posiblemente durante muchas horas. ¿Cómo puedo hablar con él sobre esto sin que sepa que lo espié?

R Aunque es posible que su hijo esté viendo páginas de Internet para adultos/as deliberadamente, también es posible que alguien más haya usado su computadora o que las páginas aparecen como anuncios emergentes ("pop-ups"). Cualquiera que sea el caso, lo cierto es que el problema es que los/las jóvenes ahora son bombardeados por imágenes sensuales de cuerpos con poca ropa en la Internet, en los anuncios, en la televisión y en las revistas. Y en algunos años su hijo llegará a la pubertad, si no la ha llegado ya. Independientemente de que vea o no páginas pornográficas, es posible que sienta curiosidad por ver cómo será su cuerpo y puede preguntarse cómo es el de una mujer desnuda.
Mientras tanto, si está preocupado por su uso de la computadora, establezca reglas básicas. Intente limitar su tiempo en la computadora, o moverla a un lugar donde usted pueda observarlo (puede explicarle que todos en la familia quieren tener un acceso fácil a la computadora). Lo más importante es que le ayuda a encontrar sitios Web en los que puede obtener información sobre la sexualidad adecuada para su edad, como www.teenwire.com y
www.scarleteen.com.

Como padre o madre, usted es el educador principal de su hijo/a con respecto a la sexualidad. De manera que, si aún no lo ha pensado, piense en los mensajes que desea compartir. Entonces, ábrase al diálogo y manténgalo abierto abordando temas distintos a medida que se presentan "oportunidades para enseñar". Por ejemplo, use una revista como Maxim (la cual es definitivamente para hombres jóvenes, pero de fácil acceso para los adolescentes) para demostrar que muchas de las modelos en la revista están retocadas para verse "perfectas" y no reales. Y hágale saber que muchas empresas utilizan el sexo para vender zapatos tenis, computadoras y otros artículos populares al colocar modelos en poses muy sensuales. Al hojear la revista, seguramente encontrará algunas fotografías que demuestren lo que está diciendo. Durante el diálogo, pregúntele a su hijo lo que piensa. Aunque es posible que esto no suceda de un día para otro, con el tiempo se dará una conversación completa.

Mi adolescente está escribiendo cosas eróticas. ¿Esto quiere decir que ella ya tiene vida sexual activa?

P Cuando entré a la alcoba de mi hija, me puse a leer su diario. Aunque sabía que no debía leerlo, el cuaderno estaba lleno de historias eróticas explícitas. Algunas parecían venir de escenas de los personajes de su programa de televisión favorito. Una anotación la describía teniendo sexo con un chico. Pienso que estas anotaciones vienen de su imaginación y no de la vida real. Pero me pregunto si estoy siendo ingenua. ¿Cree que ésta es una señal de que tiene vida sexual activa?

R Los/as adolescentes se ven inundados con mensajes e imágenes sexuales. Con una imaginación activa y amor por escribir, estos escritos del diario pueden ser simplemente formas en que su hija se expresa sexualmente, así como un escape hacia su curiosidad sexual. Pero por muy duro que sea pensarlo, también es posible que haya tenido algún tipo de intimidad con alguien. No hay manera de saberlo hasta que hable con ella.

Intente iniciar conversaciones continuas con su hija sobre todos los aspectos de la sexualidad y la salud sexual. Esto no sólo ayuda a fortalecer un vínculo y permitir que ambas hablen abiertamente sobre la sexualidad, sino que también le hace saber que usted está ahí para ayudarla y contestar sus preguntas. Comparta sus mensajes con ella sobre la pubertad, la imagen corporal, la toma de decisiones, los medios de comunicación, la masturbación, las fantasías, la presión de los amigos, la anticoncepción, etc. a medida que se presentan "oportunidades para enseñar". Incluso puede empezar mirando con ella su programa de televisión favorito y pidiéndole que le explique las personalidades y las relaciones de los personajes. Comparta con ella lo que pasaba cuando usted estaba creciendo, si sentía curiosidad por los cambios de su cuerpo o si tenía preguntas sobre el sexo; y también sus experiencias al hablar con su padre o su madre, o lo qué le hubiera gustado poder comentar con él o ella.

(*) Amy Levine, M.A., es la Coordinadora del Proyecto Familiar de SIECUS y ha trabajado en SIECUS durante más de 9 años. Está autorizada como educadora sexual por la American Association of Sex Educators, Counselors, and Therapists. Envíe sus preguntas a Amy a alevine@siecus.org o envíelas por correo al Proyecto Familiar de SIECUS al 130 West 42nd Street, Suite 350, New York, NY 10036.





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